miércoles, diciembre 13, 2006

“Dejad que los niños vengan a mí”

José Tola de Habich. Pintor, escritor, entre otras cosas

Publica nuevo libro destinado a “menores que piensan”
Próximo proyecto es hacer escultura para Miraflores

“Me dedico 16 horas al día a hacer lo que quiero”, afirma tajante José Tola. Esa estresante rutina incluye, según propia confesión, pintar, escribir, crear objetos y sentarse en un sillón a escuchar música. Es en ese lapso de tiempo que hace tres años pergeñó Una historia para un guerrero (Alfaguara), un cuento redactado e ilustrado por él.
El artista comenta que ha dado este material a imprenta gracias a la insistencia y gestiones de Mijael Garrido Lecca, amigo suyo a quien le lleva más de cuarenta años de diferencia.
Tola describe a Una historia para un guerrero como un libro para que los niños piensen. Es que, según este creador multifacético, le desagradan esos textos que tratan a los menores como deficientes mentales. “Que la casita, el chocolatito, pura tontera”.
Pero ese no es la única aventura en la que se ha embarcado. Asegura que ya tiene avanzado un proyecto de escultura monumental. “Son unas manos que se cruzan y que se ubicarían en el parque Isaac Rabin de Miraflores. Sólo me falta el permiso para empezar”.
Museos y fraile
José Tola, uno de los artistas más cotizados del Perú, recuerda que le ha costado llegar al lugar donde está. “Fueron como treinta años que las pasé negras, vendiendo mis cosas para vivir”. Sin embargo, reconoce que desde hace un tiempo puede hacer lo que quiera con tranquilidad.
Es que para este creador multifacético lo primero es el arte. Por eso considera que no se debe mezclar con otros menesteres como la publicidad. “Se nota cuando uno se dedica a otras actividades. Por suerte yo sólo me he dedicado a la creación”.
Señala que su dedicación al arte lo lleva a estar encerrado en su casa durante casi todo el año. “Si salgo, me distraigo”. En palabras suyas, durante once meses se comporta como un fraile, mientras que el restante como casquivana.
Aprovechando su buen humor le preguntamos sobre la polémica del Museo de Arte Contemporáneo. “Me da pena que Szyszlo, a su edad, se preste para eso”comentó. Por otro lado, afirmó que el museo de Gerardo Chávez en Trujillo es “una venganza comanche hecha con buen estilo”.
Para terminar, nos dio su comentario sobre los nuevos valores del arte peruano. “Hay un jovencito que me gusta mucho. No me acuerdo su nombre. Creo que se llama José Tola”.

Bob Dylan en el taller
Antes eran vínilos, después casets, ahora son los cd. Lo único constante es el cantante: Bob Dylan. Esa es la única música que escucha José Tola mientras está creando. Así sea un lienzo o una escultura, la única voz que se oye en el taller del artista es la del cantautor norteamericano. “Es que, como no sé nada de inglés y ya lo conozco de memoria, no me distrae. Además, todos los días traduzco diferente cada canción”, bromea el pintor.

Cinco motivos para sentirse orgulloso de ser peruano
Origen.
Haber nacido acá y tener mis raíces peruanas.
Oportunidades. No me gusta como está el Perú, pero acá se puede hacer algo. Hay posibilidades.
Valentina. Mi novia, Valentina, es peruana.
Ataúd. Porque tengo 63 años y pienso que debo vivir un par más acá. Además, aquí tengo mi ataúd.
Paisanos. Porque la gente es muy agradable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Bien, Tola anda de excelente humor por estos tiempos, no?

Anónimo dijo...

...me gusta mas cuando se transforma en un asesino del lienzo...si pues ...esta sonriente..no te vayas a morir ..