lunes, julio 06, 2009

El hermano pródigo


Mario (Leonardo Torres), de cuarenta años, asiste a su primera clase de natación. Sin embargo, las experiencias que tuvo hace tres décadas cuando era un niño, le impiden dar el salto a la piscina. Con esta excusa, una linda metáfora sobre la indecisión por comprometerse, empieza a recordar su vida en medio de un hogar de clase media a fines de los setenta, con un padre izquierdista y una madre conservadora. La acción gira alrededor de los conflictos familiares y las dudas religiosas del protagonista en su nuevo colegio.
Lo más interesante de la obra es la relación que se establece entre el pequeño Mario y su hermano mayor, Renato (Sebastián Monteghirfo), suerte de ídolo de su infancia. Mientras que el primero se alista con pocas ganas a recibir la primera comunión, el segundo, llevando al extremo la prédica izquierdista del padre, se acerca a Sendero Luminoso en las vísperas del conflicto interno. Las dos caracterizaciones son de lo mejor de la obra. En Torres no es novedad las buenas performaces, pero sorprende gratamente que Monteghirfo esté a su altura y le dé hondura a un personaje difícil.
En donde cojea un poco la pieza es en la caricatura que se hace de la práctica religiosa. Se manejan muchos estereotipos como el cura pederasta y mercantilista o la abuela pacata y supersticiosa. Sin embargo, de esta faceta es rescatable ese Cristo revolucionario y desenfadado, interpretado por Renzo Schuller, que orienta y confunde al pobre Mario.
En resumen se trata de una obra fuerte e intensa, en que el drama particular de la pérdida de un hermano se articula con el origen de los años del terror.


Ficha técnica
Respira de Eduardo Adrianzén
Dirige Roberto Ángeles
Actúan Leonardo Torres Vilar, Javier Valdés, Renzo Schuller y Sebastián Monteghirfo, entre otros.
Estuvo en cartelera en el Teatro Británico hasta hace poco.


Recomiendo esta crítica que es distinta a la mía.

1 comentario:

César dijo...

oye, pasa la voz para hacerte la taba a una función de éstas

¿cuándo sacas algo del SBA?

Ya sabes, a tirarse a la piscina