domingo, julio 11, 2010

Teatro en el diván

Desde hace poco está circulando La escena paterna. Dramaturgia y psicoanálisis (Fondo editorial de la Universidad de Lima). Este libro de Natalia Torres Vilar es una aproximación a cómo se construye la imagen paterna en el teatro peruano. La autora, sicóloga de profesión y proveniente de una familia dedicada a la actuación, explica este estudio.

¿Por qué se enfocó en la figura del padre en el teatro?


- Como toda investigación, uno trata de buscar placer. Uno de mis gustos es leer teatro. Entonces se me ocurrió la idea de hacer un análisis sicológico con dramaturgia peruana. El tema me ha interesado desde chica. Siempre he estado en contacto con estos textos que me parecen maravillosos. Yo no soy crítica literaria, pero a nivel sicológico son textos profundamente ricos. Y ni bien empiezas a sistematizar los datos, el tema del padre es evidente. Por sí sólo el tema reclamaba estudio.


¿Cómo es la figura paterna en la dramaturgia peruana?


- Yo parto del principio que el dramaturgo está en conexión con el público para el que escribe. Si es un tema tan recurrente hay alguna necesidad de hablar de este padre. Lo más saltante es que en la dramaturgia, salvo algunas excepciones reivindicatorias, son monstruosos, perverso, violadores, abandónicos, nada empáticos, sin ningún interés en los hijos. Personas pintadas en los personajes como muy malos. Considero que en cualquier obra literaria hay mucho de ficción, y uno toma los temas más álgidos para captar la atención. Igual, siento yo que la dramaturgia, a pesar de no ser un reflejo fiel de la realidad, permite pensar los procesos de formación de las ideas.


En su libro hace hincapié en que se basa en dramaturgia limeña. ¿Cómo es la situación en el interior?


- No hay mucho teatro. Hay más creaciones colectivas. Además, no tengo el acceso. Cuando digo dramaturgia limeña es para dejar bien claro que hay todo un imaginario del cual no puedo hablar porque no lo conozco. En provincia se hacen muy bonitos trabajos de los cuales se sabe prácticamente nada.


¿Se le hizo más difícil estudiar las obras donde ha participado usted o algún miembro de su familia?


- No. Creo más bien que te da una entrada más vivencial. Eventualmente se puede decir que te quita objetividad. A mí en especial eso no me preocupa. Me parece que todos los datos objetivos o subjetivos son enriquecedores.


¿Las herramientas de la sicología pueden servir para una crítica teatral?


- No sé si para hacer crítica de teatro. Creo que las obras te dan un material sicológico muy rico, muy profundo y abundante. Podemos aprender mucho de nosotros mismos de analizar personajes y temáticas.

(Foto Vidal Tarqui / Agencia Andina)

No hay comentarios.: