Tus dos primeras cintas, exitosas en taquilla, son más de género. En esta nueva vas más por la experimentación. ¿Por qué el cambio?
- Siempre la idea es explorar nuevos lenguajes y no sólo contar nuevas historias. Uno puede encontrar muchas maneras de narrarlas. Si uno siguiera repitiendo una forma de contar, no avanzarías. Es una onda diferente con lo que he hecho.
¿Bolero de noche lo sientes más personas y experimental que tus anteriores largometrajes?
¿Bolero de noche lo sientes más personas y experimental que tus anteriores largometrajes?
- Sí. Lo que sucede con Mañana te cuento es que la gente, cuando una novela, serie o película, tiene mucho éxito no se acuerda de otras chambas. Pero sí, Bolero de noche tiene otra onda, desde la estructura narrativa y hasta el género de la película. Tiene de historia de amor, pero también de cuento fantástico, de aventuras. Es un poco un mix de géneros. No es una película habitual en la filmografía peruana.
¿No te incomoda que se te haya encasillado con las dos entregas de Mañana te cuento y no recuerden tus cortos como TQ1992 ó 303?
- No, tampoco, porque finalmente les fueron bien. Imagínate que una película peruana está llevando dos mil, tres mil personas. Mañana te cuento, la saga, llevó más de 500 mil. Tampoco me puedo quejar. Uno sigue haciendo cosas. Va formando parte de tu filmografía. De hecho Bolero es otra cosa. Dentro de poco empezaré a filmar El evangelio de la carne, que es mi proyecto más personal y que escribí con Úrsula Vilca. Tampoco tiene nada que ver con TQ1992, Bolero de Noche o Mañana te cuento.
¿Qué te atrajo de esta película?- Dirigir Bolero de noche me pareció un desafío porque, a pesar de no ser una película de época, sí juega con dos tiempos. Por un lado tenemos al Trovador, el bar de la Barona, con personajes un poco congelados en el tiempo. Se visten y comportan, construyen sus frases, de una forma antigua. Todo un ritual para enamorarse, visto desde el género del bolero. Por el otro lado, tenemos a la Gitana, que representa al mundo de la música electrónica.
¿Qué te atrajo de esta película?- Dirigir Bolero de noche me pareció un desafío porque, a pesar de no ser una película de época, sí juega con dos tiempos. Por un lado tenemos al Trovador, el bar de la Barona, con personajes un poco congelados en el tiempo. Se visten y comportan, construyen sus frases, de una forma antigua. Todo un ritual para enamorarse, visto desde el género del bolero. Por el otro lado, tenemos a la Gitana, que representa al mundo de la música electrónica.
¿Cómo llegaste a esta historia? El universo del Trovador recuerda a las cintas mexicanas antiguas
- Hay un poco de eso. En México es muy fuerte el bolero, pero en el resto de Latinoamérica también. Es un género que siempre está presente. Teníamos la historia original de un guión mexicano que ganó un premio, y a partir de allí la reescribí con Úrsula Vilca. Nos pasamos tres, cuatro meses, adaptándolo a lo que acá se podía hacer.
- A mí ya me gustaba un poco el bolero por mi papá. A mi productor le encanta el bolero. Y, bueno, estuve escuchando un montón. Trabajamos con Los Morunos. Gracias a ellos conocimos más grupos. Fue muy interesante conocer el mundo del bolero.
¿Fue adrede que el segundo tema que se escucha en la película sea Motivos de Los Morunos, canción que usara Francisco Lombardi en Caídos del cielo? ¿Una especie de cita u homenaje?
¿Fue adrede que el segundo tema que se escucha en la película sea Motivos de Los Morunos, canción que usara Francisco Lombardi en Caídos del cielo? ¿Una especie de cita u homenaje?
- No, porque es la canción icónica de Los Morunos. Nos parecía paja ponerla en el bar. La idea era presentarlos como el grupo del bar de la Barona. Esos locales tienen una pequeña banda que siempre tocan allí.
Por el tipo de propuesta de este largometraje es posible que no vaya a tener tal éxito de taquilla que tus dos anteriores.
- Mi primera preocupación como director es que la película me guste a mí. Ya la vi y me gustó, es novedosa para nuestra filmografía. Tiene además el elemento de la historia romántica, que trasciende edades. Una historia de amor puede funcionar. Tal vez no tenga un gancho comercial tan evidente como Mañana te cuento. Pero al ser una historia de amor tan diferente de las de Hollywood, puede ser atractiva, se pueden sorprender. Hay además un buen elenco con Giovanni Ciccia, Vanessa Terkes, Leonardo Torres. Yo sí le tengo fe. Si se logra que el público vaya los primeros días, el boca a boca será muy positivo.
Hablando del elenco, fuera de los protagonistas, sorprende el nivel de Leonardo Torres.
- Sí, está espectacular. Estábamos buscando al actor para el Trovador. Una de las opciones era Leonardo Torres. Y, de repente un día, conversando con Diego Lombardi, con quien hice el casting, se nos ocurrió probarlo como el diablo. Hicimos el casting y se quedó. Es un diablo que tiene una elegancia, ironiza, tiene sarcasmo. Logra engancharte, enredarte. Le ha dado un aire de misterio y humor, súper interesante.
Hace unos meses te quejaste por la forma en que te premiaron en Conacine. ¿Consideras que te perjudicaron para difundir tu cinta?
- No, para nada. Imagínate quién se va a acordar. Ni yo me acuerdo quiénes eran. Y más bien me va a dar gusto que vean la película. Me pareció un apresuramiento o, simplemente ignorancia. Si tú participas en un concurso de postproducción, tú mandas tu cinta en el punto en el que la tienes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario